(Reuters) – El equipo técnico del Banco Central de Colombia revisó al alza su pronóstico de inflación para este año, en medio del persistente incremento de los precios, que ha provocado una respuesta agresiva de la autoridad monetaria incrementando el costo del dinero.

El equipo técnico -cuyos análisis son insumo fundamental para las decisiones que adopta el directorio del banco emisor-, aumentó su estimación de inflación para este año a un 8,7% desde una previa de 7,1%, aún por encima de la meta oficial de largo plazo del Banco Central, de 3%.

«Aunque varios de los riesgos al alza sobre la inflación se han materializado y se han incorporado en las sendas de pronóstico, aún persiste la incertidumbre asociada con factores idiosincrásicos que enfrenta la economía colombiana», indicó el reporte.

«Estos pronósticos tienen una incertidumbre elevada, relacionada en especial con el comportamiento futuro de las condiciones financieras internacionales, la evolución de la tasa de cambio, el ritmo de ajuste de la demanda interna, el grado de indexación de los contratos nominales y las decisiones que se tomen en cuanto al precio interno de los combustibles y de la energía eléctrica», agregó.

Los precios al consumidor en Colombia acumularon un aumento 13,12% durante el 2022, el dato más alto en casi 24 años.

Para el 2024, el equipo técnico del banco mantuvo su proyección de inflación en un 3,5% frente al estimado en el informe anterior, publicado a finales de octubre del año pasado.

En tanto, el equipo técnico dijo que la senda de la tasa de interés de referencia del banco es mayor en promedio que la esperada por el mercado.

«La senda esperada por el equipo técnico para la tasa de política es, en promedio para un horizonte de ocho trimestres, mayor de lo anticipado por el mercado en la encuesta de enero de 2023», agregó el documento.

El Banco Central subió el viernes pasado su tasa de interés en 75 puntos básicos a un 12,75%, su nivel más alto desde noviembre de 1999, aunque en una magnitud menor a lo esperado por el mercado, en busca de frenar las expectativas de inflación.

El gerente del banco, Leonardo Villar, dijo en esa ocasión que la junta no necesariamente ha cerrado su ciclo de ajuste monetario, pese a las predicciones de la mayoría del mercado, de que el aumento de enero habría sido el último.