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18 de julio de 2025Colombia ha tenido un retroceso muy grande en materia de inseguridad y se está volviendo a los años noventa, donde no se podía ir a las fincas, con todo lo que ello implica para un sector tan importante como es el ganadero que le produce importantes divisas al país.
En ese punto coincidieron el presidente de la Unión Nacional de Asociaciones Ganaderas (Unaga), Daniel Espinosa y el gerente de Subastar, Eduardo Kerguelen, durante un foro organizado por La República, en el cual alertaron por la situación que afrontan los productores del campo.
De acuerdo con Kerguelen, debido a la inseguridad hay un desaceleramiento en la industrialización en el campo. A los ganaderos les da miedo meterle más tecnología al campo porque no hay seguridad del retorno de la inversión.
Indicó que la inseguridad se refleja en temas como el boleteo, la extorsión, el secuestro que todavía existe y ahora se está potencializando más.
Por su parte, Espinosa manifestó que debido a la inseguridad, la adecuada producción se merma y las personas paran la inversión. Hoy día muchos ganaderos no han podido volver a sus fincas.
Las subastas
Según Kerguelen frente a este flagelo, un aspecto que ha favorecido mucho son las subastas ganaderas, tema que nació en Colombia en el año 1995, cuando había la mayor crisis en seguridad y es un mecanismo que ayuda a mitigar la comercialización del ganado porque el ganadero manda su ganado y ya hoy se vende hasta virtual. Entonces, él no corre riesgo de ir a la finca, de mostrar un ganado, de llevar un cliente, sino que manda el ganado, se vende y las cosas son un poco más ocultas y hay mucho más privacidad en estos temas de comercialización.
En el caso de Subastar el balance del primer semesntre es favorable porque el año pasado, hubo un decrecimiento debido a que con el invierno de 2022, hubo una baja en la producción de terneros. En la zona de la Costa se produjeron 500 mil terneros menos y, en ese orden de ideas, esos terneros en el 2024 tenían que salir a comercializarse y no salieron. Ahí hubo un decrecimiento, pero este año las cosas están mejorando y las producciones de ganados en la subasta y la interacción en la subasta han estado mucho mejor.
La trazabilidad
Otro tema que resulta crucial para los dos representantes de los ganaderos es el de la trazabilidad, donde se tienen avances importantes a nivel de los animales, más no así de toda la cadena y restaltaron la falta de voluntad política.
Para el gerente de Subastar, hoy día Colombia llega con sus animales y carne a mercados de consumo donde no se valora la calidad del alimento que produce el país y que es a pasto, una tendencia que crece a nivel mundial.
Por eso, dijo, se necesita voluntad política para terminar el tema de trazabilidad, el tema de chapetas o de bolo o de microchip en los animales, para que así ahí sí sea una trazabilidad real para los otros países. Porque “nosotros podemos tener una trazabilidad a nivel de ganadero, pero esa no es válida para los países. Entonces yo creo que ahí esa voluntad política se debe generar, se debe apoyar para que haya esas exportaciones y para que Colombia sea en verdad ese país exportador de genética y de ganados comerciales y de carne a otros países mucho más exquisitos”.
Sostuvo que las cuentas son muy sencillas. Hacerlo cuesta alrededor de $100.000 millones, que para un programa estatal no es mucho porque nos vamos a poner mucho más atractivos internacionalmente. En Nueva York, por ejemplo, pagan la carne más cara del mundo porque es sello verde y eso es lo que produce Colombia, pero sin trazabilidad no hay posibilidades.
Por su parte, Espinosa mencionó que sin trazabilidad no se puede exportar carne, puede que ganado en pie que es más fácil pero no tiene la misma rentabilidad. El Estado tiene que entender que esto es un negocio que le trae divisas al país y que en vez de atacarlo hay que fortalecerlo, no se trata de ideologías sino de entender que es un sector importante para el país.
Pegado a eso está la parte sanitaria y se necesita que Colombia esté libre de brucelosis sin vacunación y trabajar duro a la tuberculosis para poder exportar, concluyó.