De acuerdo con la Bitácora Económica de Fenalco, en septiembre se empezó a sentir más fuerte el proceso de desaceleración en las ventas del comercio y la confianza empresarial continúa cayendo, en gran medida, como consecuencia de la alta inflación y de la reforma tributaria, que adelanta su curso en las comisiones económicas del Congreso de la República.

Para el 62% de los empresarios encuestados el volumen de ventas decreció o se mantuvo igual, mientras que para tan solo el 38% el volumen de ventas creció, comparado con el mismo mes del año anterior.

El crecimiento mensual a dos dígitos ha llegado a su fin. Hasta julio, según el Dane, las ventas detallistas aumentaban 16.3% pero con la pérdida de tracción en el segundo semestre el ritmo de crecimiento para el año completo será inferior. De acuerdo con la Encuesta de Opinión de FENALCO, el 38% de los empresarios logró aumentar su volumen de ventas en comparación con igual mes del año anterior, el mismo porcentaje para quienes dijeron que fueron similares y 24% reportó caída. La desaceleración del comercio se explica principalmente porque la elevada inflación ha menguado los presupuestos familiares. En septiembre el IPC sin alimentos en 12 meses subió a 8,33% desde el 7,83% de agosto pasado.

Datos preliminares de varios bancos indican que ya se observa una mayor cautela en el uso de mecanismos crediticios por parte de los consumidores debido al ajuste en las tasas de interés. Hay una reducción en el ingreso disponible de los contribuyentes que debieron pagar imporrenta, y también tenemos un marco de comparación más alto, como quiera que en  septiembre del 2021 las ventas crecieron más del 15% en términos reales. Al indagar por los principales problemas de la coyuntura, se observa un ligero descenso en la intensidad del problema de abastecimiento, que se explica por la corrección en las tarifas de los fletes de contenedores provenientes de Asia. Hoy, el costo de un contenedor está en alrededor de 2.200 dólares, cuando hace unos meses llegó a estar por encima de los diez mil.

Frente a las expectativas futuras, un 33% de los empresarios piensa que la situación puede mejorar, teniendo en cuenta que vienen meses con fechas de alto tráfico para el comercio; mientras tanto, el 67% restante se declara pesimista o sin expectativas para los próximos meses.

En septiembre se mantuvo la tendencia al enrarecimiento en el clima de los negocios debido a la incertidumbre que está causando la Reforma Tributaria, la persistencia de alta inflación, y la debilidad de la economía mundial. Sin embargo, los comerciantes esperan que octubre sea un mes aceptable debido a que registra cinco semanas y tres quincenas y que viene acompañado de atractivas promociones y “días especiales” que los compradores aprovechan, incluso para comenzar a adquirir regalos para el fin de año. De acuerdo con el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal, una reforma tributaria de esta magnitud y en las actuales circunstancias de inflación terminará afectando la inversión, el ahorro y el consumo de todos los colombianos, por eso la preocupación de nuestros afiliados y del empresariado en general.