Como un golpe bajo a la economía y a los colombianos calificó Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, el anuncio de una nueva reforma tributaria en las actuales circunstancias del país y bajo la presión de un presupuesto desfinanciado por 12 billones de pesos, cuyo proyecto presentado por el Ministerio de Hacienda, registra un incremento en los gastos de funcionamiento para el 2025, del 6.8% y en contraste un desplome en la inversión cercana al 17%, justo cuando se requiere más formación de capital para dinamizar la golpeada economía.

El vocero de los comerciantes señaló que el país debe evaluar el alcance de una reforma de esta magnitud, en medio de un momento de desaceleración y estancamiento económico. “Este año el ritmo sigue siendo lento, con un 0,7% en el primer trimestre y un 2,1% en el segundo, que no se puede interpretar como un camino de reactivación, pues está mucho más explicado por el incremento de los gastos en burocracia y de la administración pública, cuyo crecimiento fue superior al 13%”, explicó.

En este sentido afirmó que los colombianos no están preparados para una nueva reforma tributaria. Este Gobierno le ha venido cerrando las ventanas de oportunidad al contribuyente y esto, como lo hemos advertido en los últimos dos años, ha afectado notoriamente el ingreso disponible de los hogares, afectando el consumo, el ahorro y la inversión. “Lo reiteramos: otra reforma tributaria es inconveniente, porque tenemos una economía en desaceleración y estancada, que está sufriendo los efectos de las reformas del 2021 y 2022. Hacemos un llamado para que el Congreso de la República tenga en cuenta estas realidades, tome las decisiones a las que haya lugar y no permita semejante agresión a los contribuyentes”.

También advirtió sobre la inconveniencia de que el Congreso de la República apruebe un presupuesto para el año entrante desfinanciado en 12 billones de pesos porque esto le “metería presión” a los congresistas para que aprueben como sea una reforma tributaria. Si el Congreso aprueba el presupuesto, implícitamente estará aprobando un proyecto desfinanciado, lo que no se había visto antes en la historia reciente del país.

“Hay que hacer las cosas al derecho y esto es reducir el presupuesto en 12 billones de pesos y dejarlo en 511 billones en equilibrio”, enfatizó.

“Los proyectos del presupuesto desfinanciado y la nueva reforma aumentan la incertidumbre política y el nerviosismo de los mercados.

Antes que una nueva reforma tributaria, el Gobierno debe ser serio en el control del desbordado gasto en burocracia y el despilfarro innecesario de recursos, así como y preocuparse por la recuperación de los billones perdidos por la corrupción”, concluyó Cabal Sanclemente.

Partido conservador

Entre tanto el Partido Conservador reafirmó su compromiso con el manejo responsable de las finanzas públicas y la búsqueda de un equilibrio justo en materia tributaria. Con esta postura, el partido anunció que tomará una posición crítica frente a la nueva reforma tributaria presentada hoy por el Gobierno Nacional.

Para el Partido Conservador, los colombianos no deben seguir siendo quienes, a través de más impuestos, asuman el déficit fiscal del país. Consideran que este déficit ha sido, en gran medida, el resultado de políticas públicas implementadas por el Gobierno sin contar con la viabilidad presupuestal necesaria.

«La presentación de una reforma tributaria en medio de la discusión del Presupuesto General de la Nación no puede ser un mecanismo de presión para condicionar la aprobación de un presupuesto desfinanciado, como lo plantea el Gobierno Nacional», expresó el partido en un comunicado.

Además, sectores de la academia, gremios y expertos han advertido sobre los peligros de aprobar una reforma tributaria en la coyuntura actual. El Partido Conservador comparte estas preocupaciones y considera que aumentar la carga tributaria no es la solución adecuada para enfrentar la situación fiscal del país.

En lugar de más impuestos, el Partido Conservador exige al Gobierno adoptar un plan de austeridad, ejecutar los recursos ya asignados por el Congreso y que aún no han sido utilizados, y, sobre todo, diseñar un plan de reactivación económica inmediato.

Finalmente, la bancada conservadora anunció que realizará un estudio minucioso de la reforma presentada, cuyos resultados se darán a conocer públicamente en los próximos días.