(Reuters) – Las acciones europeas cayeron el miércoles y cerraron el mes a la baja, ya la inflación de la zona euro en agosto alcanzó otro récord y la preocupación por la energía se intensificó después de que Rusia comenzó a interrumpir los flujos de gas a Alemania a través de una ruta clave para los suministros.

El índice STOXX 600 perdió un 1,1%, hasta tocar un nuevo mínimo de seis semanas, prolongando la racha de pérdidas por cuarto día consecutivo. Las acciones energéticas cedieron un 2,6%, encabezando las pérdidas, ya que los precios del crudo siguieron bajando por temor a la recesión.

El referencial STOXX 600 registró una caída mensual del 5,1% por el temor a las políticas restrictivas de los bancos centrales y a los crecientes riesgos de recesión y racionamiento energético en la región.

La inflación de la zona euro se aceleró a otro máximo histórico del 9,1% este mes desde el 8,9% del mes anterior, superando las expectativas y manteniéndose lejos del objetivo del 2% del Banco Central Europeo (BCE). El índice bursátil de la zona euro cayó un 1% y se situó cerca de sus mínimos de seis semanas.

«Se trata de otra cifra muy llamativa, que muestra que los consumidores estaban sintiendo el dolor incluso antes de que Rusia reforzara su control sobre el mercado energético», dijo Susannah Streeter, de Hargreaves Lansdown.

«Estas lecturas echarán más leña al fuego de las preocupaciones de que los responsables de la política del BCE apliquen una gran subida en septiembre, pese a la incertidumbre que se avecina en términos de seguridad energética», agregó.

Además de la preocupación por la recesión, Rusia interrumpió el suministro de gas a través de la ruta de suministro clave para Europa, Nord Stream 1. «Los precios del gas y el sentimiento europeo están a punto de enfrentarse a una importante prueba de estrés, ya que el gasoducto Nord Stream se cerrará hoy por mantenimiento durante tres días», dijeron los estrategas de ING en una nota a clientes.