(EFE).- La transferencia de la Presidencia pro tempore de la Alianza del Pacífico tendrá gran importancia para los trabajos que realiza el organismo integrador en favor de las pymes, destacó el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo de Perú.

Chile recibió este miércoles de México, de manera temporal, la Presidencia del organismo y el próximo 1 de agosto la traspasará a Perú.

«Esta decisión permitirá continuar el trabajo de importantes grupos técnicos y comités en el marco de la Alianza del Pacífico en favor de la consolidación, fortalecimiento e internacionalización de las micro, pequeñas y medianas empresas», señaló el ministerio en un comunicado.

Agregó que durante este año el Consejo Empresarial de la Alianza del Pacífico (CEAP), cuya Presidencia pro tempore ejerce actualmente la Cámara de Comercio de Lima (CCL), trabaja «de forma continua» en el fortalecimiento del bloque como una plataforma para el desarrollo de negocios y la generación de empleo.

El ministerio destacó que la Alianza del Pacífico es la octava economía del mundo y representa el 42,9 % del PIB de América Latina, además de ser la sexta potencia exportadora y atraer el 57,4 % de la inversión extranjera directa en América Latina.

En 2022, el comercio de Perú con los países de la Alianza del Pacífico alcanzó la cifra récord de 8.418 millones de dólares.

Perú asumirá la Presidencia pro tempore de la Alianza del Pacífico el 1 de agosto de manos de Chile, país que este miércoles asumió ese cargo de manera provisional a causa de la resistencia de México de cederla a Lima por razones políticas.

La decisión se adoptó en un encuentro realizado en Santiago de Chile, en el que participaron el ministro chileno de Relaciones Exteriores, Alberto Van Klaveren; la embajadora de México en Chile, Alicia Bárcena; el encargado de Negocios del Perú en Chile, Renzo Villa Prado; y el encargado de Negocios de Colombia en Chile, René Correa Rodríguez.

«Nosotros siempre hemos reconocido el derecho que le corresponde al Perú para ejercer la Presidencia pro tempore y es en ese espíritu que hemos asumido la responsabilidad de actuar como intermediarios justamente para poder resolver esta situación», señaló Van Klaveren.

Perú tendría que haber recibido la presidencia del bloque de manos de México en diciembre pasado, pero el mandatario Andrés Manuel López Obrador no reconoce el Gobierno de Dina Boluarte, a la que llama «usurpadora», y desde entonces, el país andino ha reclamado dicho cargo en diversas ocasiones.

El pasado 1 de junio, el pleno del Congreso peruano declaró persona non grata al presidente mexicano, por sus repetidas declaraciones sobre asuntos internos de Perú y la negativa a transferir la Presidencia de la Alianza del Pacífico.

López Obrador considera que Boluarte debería dejarle «la Presidencia al que ganó en una elección libre y democrática, a Pedro Castillo», quien está preso desde el pasado 7 de diciembre tras ser destituido por el Congreso peruano luego de intentar dar un golpe de Estado.