(Reuters) – Los consumidores estadounidenses iniciaron 2023 con el mayor optimismo de los últimos nueve meses, alentados por unos altos ingresos y la moderación de la inflación, a pesar de que la mayoría teme que una recesión pueda hacer tropezar a la economía este año.

El Índice de Confianza de los Consumidores de la Universidad de Michigan subió casi un 9% en enero, a 64,9 puntos, el nivel más alto desde abril de 2022, frente al 59,7 de diciembre. La lectura fue ligeramente mejor que el promedio de las expectativas en una encuesta de Reuters entre economistas de 64,6, en línea con la lectura preliminar de enero publicada dos semanas antes.

La valoración de la situación actual mejoró notablemente, con una subida de más del 15% a 68,4 este mes, también la más alta desde abril. Este índice ha subido más de un 27% desde su mínimo histórico en junio, cuando la inflación alcanzaba su nivel más alto en 40 años, lo que llevó a la Reserva Federal de a subir las tasas de interés a su mayor ritmo en una generación el año pasado.

El índice de expectativas de futuro subió al nivel más alto en un año, pero la Directora de Encuestas de Consumidores, Joanne Hsu, advirtió de que las recientes mejoras podrían verse comprometidas por el enfrentamiento político en Washington en torno al endeudamiento del gobierno estadounidense.

Los republicanos del Congreso están decididos a no elevar el límite legal de endeudamiento del gobierno federal sin recortes del gasto a los que se opone el gobierno de Joe Biden, un punto muerto que se espera lleve a una disputa a finales de este año.

«En particular, el debate sobre el techo de la deuda se avecina y podría revertir las ganancias observadas en los últimos meses; las crisis anteriores del techo de la deuda en 2011 y 2013 provocaron fuertes caídas en la confianza del consumidor», dijo Hsu en un comunicado.

En tanto, las estimaciones de los consumidores sobre la inflación a corto plazo cayeron al nivel más bajo desde abril de 2021, situándose en el 3,9% para los próximos 12 meses.

Sus perspectivas de inflación a cinco años se mantuvieron estables desde diciembre en el 2,9%. Ambas cifras están muy por debajo de los elevados niveles observados a mediados de 2022, cuando los precios al consumo subían más de un 9% interanual, la tasa más rápida desde los años ochenta.

Otro indicador de la inflación preferido por la Fed cayó en diciembre a 5%, su nivel más bajo desde septiembre de 2021, frente al 7% de junio.

Estos datos publicados a primera hora del viernes ayudaron a consolidar las expectativas de que el banco central reduzca el tamaño de sus recientes subidas de tasas a un cuarto de punto porcentual cuando sus autoridades se reúnan en Washington la próxima semana.