(Bloomberg) — A casi cuatro años de irrumpir en escena y obtener el reconocimiento de más de 50 países como líder legítimo de Venezuela, Juan Guaidó, podría estar a punto de ser marginado por los aliados de la oposición tras fracasar en su intento de desbancar al presidente, Nicolás Maduro.

Casi 70 legisladores de Primero Justicia, Una Nueva Era y Acción Democrática, tres de los cuatro principales partidos de oposición de Venezuela, dicen tener suficientes votos para remover a Guaidó como su líder y crear una comisión de cinco miembros para asumir sus atribuciones ejecutivas, dijeron el miércoles representantes del grupo.

La comisión estaría a cargo de administrar los gastos y los activos del país en el exterior, actualmente controlados por la oposición. La Asamblea Nacional, a cargo del grupo, se mantendría en funciones pero solo para debatir asuntos relacionados con estos recursos mientras que el Gobierno interino y la mayoría de sus entidades serán eliminados.

“No podemos continuar con una estrategia que no ha dado resultados”, dijo a periodistas el diputado Alfonso Marquina al presentar la propuesta durante una rueda de prensa en Caracas rodeado de representantes de otros partidos.

La medida se produce después de que Guaidó fracasara en su estrategia de destituir a Maduro mediante la creación de un Gobierno paralelo con el apoyo de aliados internacionales, tras unas elecciones generales de 2018 que fueron ampliamente consideradas fraudulentas. Si bien docenas de naciones respaldaron a Guaidó al principio, ahora solo un puñado de Gobiernos, incluido el de Estados Unidos, continúan reconociéndolo como el presidente legítimo de Venezuela.

Maduro, que ha comenzado a hacer viajes internacionales nuevamente y está cabildeando por el alivio de las sanciones, se prepara para una posible elección presidencial en 2024. La oposición planea celebrar elecciones primarias para respaldar a un solo candidato que le desafíe y está utilizando conversaciones con observadores externos para tratar de conseguir garantías para la futura votación.

Guaidó solo cuenta con el apoyo de su antiguo partido Voluntad Popular y aliados más pequeños. La votación definitiva sobre las propuestas está programada para la próxima semana, ya que el estatuto actual vence el 31 de diciembre.