(Bloomberg) — El potencial crecimiento de la economía global hasta el final de la década se ha desacelerado al nivel más débil en 30 años, señaló el Banco Mundial, citando las consecuencias de la pandemia de coronavirus y el conflicto en Ucrania.

Tras comenzar el milenio a un ritmo más rápido, el “límite de velocidad” de la economía global —“que es la tasa máxima a largo plazo a la que puede crecer sin provocar inflación”— se reducirá entre 2022 y 2030 a un 2,2% anual, dijo la organización en un informe publicado el lunes.

“Dentro de poco podríamos estar ante una década perdida para la economía mundial”, dijo Indermit Gill, economista en jefe y vicepresidente sénior de Economía del Desarrollo del Banco Mundial, en un comunicado que acompañó al informe. “La actual caída del crecimiento potencial puede tener grandes repercusiones en la capacidad del mundo para abordar la creciente variedad de desafíos específicos de nuestro tiempo: la pobreza persistente, los ingresos divergentes y el cambio climático”.

El aspecto positivo del informe de 550 páginas del banco multilateral de desarrollo es que el potencial crecimiento podría llegar hasta un 2,9%, lo que representaría una aceleración si los encargados de política monetaria implementan los planes correctos para mejorar la oferta laboral y productividad y apuntalar la inversión.

La investigación más reciente del Banco Mundial se contrapone con el contexto de una economía global frágil que aún se tambalea por la guerra de Rusia en Ucrania y los esfuerzos para reabrir después de los días más oscuros de la pandemia de covid. Muchas economías, incluida China, se enfrentan a crisis demográficas que han significado una frenética lucha por políticas para promover la maternidad, o retrasar la edad de jubilación, como se ha observado Francia en el último tiempo.

Los analistas del informe señalan que las cosas podrían empeorar, por ejemplo, con caídas más pronunciadas en el potencial crecimiento si se materializa una crisis financiera mundial o una recesión.

Estas son las medidas de política monetaria específicas de los autores para detener esta disminución en el crecimiento potencial:

Aumento de la participación en la fuerza de trabajo

A los cambios demográficos, es decir, “la disminución de la población en edad laboral y la menor participación en la fuerza laboral a medida que las sociedades envejecen”, se les atribuye cerca de la mitad de la desaceleración que se prevé en el potencial crecimiento hasta 2030.

Los autores apuntan específicamente a economías con bajas tasas de participación laboral femenina, y estiman que algunas en las regiones del sur de Asia y Medio Oriente y el norte de África podrían aumentar su potencial crecimiento en 1,2 puntos porcentuales al año en el período entre 2022 y 2030 si elevan esas tasas y las equiparan con el promedio de las economías de mercados emergentes y en desarrollo.

Coordinación fiscal-monetaria

Se ha convertido en una declaración tras la pandemia: los gobiernos y los bancos centrales deben trabajar de forma más conjunta para garantizar que sus esfuerzos no se contrapongan, especialmente en medio de una inflación aún alta. El informe del Banco Mundial insta a centrarse en frenar el aumento de los precios, consolidar la estabilidad del sector financiero y reducir la deuda en un intento por recuperar la confianza de los inversionistas.

Incremento en la inversión

Los Gobiernos deben invertir más dinero para trabajar en proyectos y, especialmente, prestar atención a la mitigación del riesgo climático, incluidos el transporte, la energía, la agricultura y gestión de la tierra y los recursos hídricos, según el informe. Los autores estiman que hacerlo podría otorgar un margen de 0,3 puntos porcentuales por año al potencial crecimiento.

Reducción de los costos comerciales

Si bien fomentan una mayor liberalización y pactos comerciales, los analistas del Banco Mundial instan a los países con los costos de envío y logística más altos a reducirlos a la mitad, incluso a través de cambios en los procedimientos aduaneros y fronterizos que han actuado como una tarifa adicional efectiva. Se ha demostrado que los retrasos en el tránsito son bastante costosos, ya que cada día de transporte equivale a un impuesto de 0,8%, según otra investigación que cita el informe.

Los autores señalan que los descuentos en los costos comerciales se pueden lograr de una manera respetuosa con el clima, por ejemplo, eliminando el sesgo hacia bienes producidos con altos niveles de emisiones de carbono que se observa en los aranceles de muchos países.

Motor de servicios El sector de servicios se anuncia en el informe como potencialmente “el nuevo motor del crecimiento económico”, lo que apunta a un aumento de la era covid en las exportaciones de servicios profesionales relacionados con la tecnología de la información y las comunicaciones a más de la mitad de todas las exportaciones de servicios en 2021, frente al 40% de apenas dos años antes. Eso es muy auspicioso para la productividad, escriben los analistas, y las economías en desarrollo deberían apuntar especialmente a reforzar la educación y la capacitación asociadas.