(Reuters) – Colombia registró un descenso en los niveles de desempleo durante el 2022 por segundo año consecutivo, acercándose a los niveles previos al estallido de la pandemia del COVID-19 en medio del dinamismo de la economía, reveló el martes el Departamento Nacional de Estadísticas (DANE).

El desempleo urbano en el país sudamericano -medido en las 13 principales áreas metropolitanas-, promedió el año pasado un 11,4%, en comparación con un 15,2% durante el 2021 y muy cerca al 11,2% que marcó en el 2019, antes de la pandemia. En el 2020 el indicador alcanzó un 18,2%

Alrededor de dos tercios de los puestos formales de trabajo se concentran en las ciudades del país de 50 millones de habitantes.

En una medición más amplia pero menos referenciada por los mercados, el desempleo nacional -que incluye el área rural-, registró un promedio de 11,2% en el 2022, desde un 13,8% en el año previo. En el 2020 el indicador alcanzó un 15,9% y en el 2019 un 10,9%.

Al cierre del año pasado se contabilizaron en Colombia 22,47 millones de personas con trabajo, 2,57 millones de desempleados y 14,2 millones de personas inactivas, es decir, fuera de la fuerza laboral.

La mejora en las cifras laborales se produjo en medio de un favorable comportamiento de la cuarta economía de América Latina que, según proyecciones del Banco Central, habría registrado un crecimiento de un 8% durante el año pasado.

No obstante, para el 2023 el banco emisor pronostica una expansión del PIB de un 0,2% y para el 2024 un crecimiento de un punto porcentual.

Según el reporte del DANE, la informalidad laboral en el país disminuyó en el 2022 a un 57,6%, desde un 59,3% al cierre del 2021.

Solo en diciembre del año pasado, la tasa de desempleo urbano disminuyó a un 10,8%, desde un 11,4% en igual mes del 2021.

A nivel nacional, la tasa de desocupación en el último mes del 2022 bajó a un 10,3%, en comparación con un 11,1% en diciembre del año previo.

Reacciones

Según Anif el desempleo en diciembre de 2022 se ubicó en 10.3%, regresando nuevamente al terreno de los dos dígitos. Con eso, el desempleo promedio para el 2022 fue de 11.2%, una cifra que muestra que la recuperación de la economía fue superior a la del empleo, pues nunca recuperamos niveles de ocupación como los que vimos justo antes de la emergencia sanitaria, mientras que la economía si superó los niveles prepandemia.

El dato de desempleo de diciembre se ajusta a las predicciones que hemos hecho desde Anif en los últimos meses. Debido a las presiones inflacionarias y decisiones de política monetaria que ya se traducen en una menor capacidad de pago de los hogares -y por tanto afectando sectores como el comercio, en donde se concentra la mayor cantidad de ocupados- se ha visto afectado el empleo por el lado de la demanda.

Mientras tanto, por el lado de la oferta, hay una mayor cantidad de desocupados que en noviembre, lo que supone una mayor presión al mercado laboral que en conjunto con problemas estructurales, empujan el desempleo al alza. Ese es un patrón que estaremos viendo durante los meses subsecuentes.

Por su parte, el presidente de la Andi, Bruce Mac Master, manifestó que “la disminución de la tasa de desempleo en el país, como la registrada en 2022 de 2,6 puntos porcentuales frente a 2021, siempre será una buena noticia. Es una bandera de la Andi promover la creación de condiciones que permitan la creación de más y mejores puestos de trabajo, pues consideramos que esta es la mejor y más efectiva estrategia de promoción social y superación de la pobreza”.

No obstante, Mac Master advirtió que la tasa de desempleo de 2022, pese a ser inferior a la de 2021 (13,8%) y 2020 (16,5%), aún está por encima del 10,9% registrado en 2019, antes de la pandemia.

El dirigente gremial también dijo que los resultados de la encuesta van en línea con el crecimiento económico registrado en el 2022 y que, según el ISE, hasta noviembre registraba una variación de año corrido de 8,1%, lo cual tiene coherencia con las proyecciones de crecimiento del PIB de entre 7% y 8%.

“Las cifras reflejan una recuperación del aparato productivo, pero también una moderación del crecimiento que se verá reflejada en el 2023. Con esto se ratifica la necesidad de focalizar nuestros esfuerzos en contrarrestar el efecto de la desaceleración sobre el empleo. Consideramos que en este escenario será muy importante poder contar con políticas anticíclicas que incentiven y apoyen a todo el aparato productivo, no solo a la demanda», concluyó.

Entre tanto, la economista de BBVA Research para Colombia, María Claudia Llanes, indicó que entre 2021 y 2022 el empleo aumentó en 1,6 millones a nivel nacional, de los cuales 68% asalariado (1,1 millones), 54% urbano (0,9 millones), 60% en cinco sectores de servicios (1,0 millón) y 16% en la industria (262 mil). Con esto, el crecimiento del empleo fue más que todo asalariado, urbano, en los sectores de servicios.

Al comparar diciembre de 2022 con noviembre de 2022, ajustando por la estacionalidad propia de cada mes, el empleo se mantuvo estable, en niveles elevados, teniendo en cuenta el fuerte repunte que tuvo desde mediados de 2021 y hasta mediados de este año. Para 2023 esperamos un menor crecimiento del empleo, en línea con la desaceleración de la economía.